Mucho antes de empezar a hablar de esta tecnología tendríamos que entender cómo funciona un equipo de eficiencia estándar o convencional.

Los equipos de Aire Acondicionado rigen su operación con un termostato que registra la temperatura del ambiente del recinto que se está acondicionando y hace que el compresor del equipo arranque y enfríe, una vez alcanzada esta temperatura el equipo se detiene hasta que la temperatura vuelva a subir un par de grados o como este configurado el termostato y el equipo vuelve a arrancar y a enfriar hasta llegar a la temperatura deseada una y otra vez, a este tipo de equipo también se le conoce como ON – OFF o todo o nada dentro del ramo del aire acondicionado.

Pasemos al tema del día de hoy… ¡Inverter! la escuchamos con más frecuencia en los equipos de aire acondicionado, pero que significa?

Es un componente electrónico, su función es alterar la velocidad del compresor y lo regula para que, sin llegar a parar disminuya su velocidad hasta el mínimo necesario para mantener la temperatura deseada.

Esta innovadora tecnología regula el funcionamiento del compresor de cierta forma que trabajen en frecuencias y a una velocidad más constante, lo que permite ahorros de energía de hasta el 40% con respecto a los equipos de eficiencia estándar.

En otras palabras permite que el equipo se adapte a las necesidades del ambiente en todo momento, haciendo que usted consuma solamente la energía que realmente necesita y que también tenga un mayor confort ya que mantiene la temperatura del ambiente en un margen entre -0.5 y + 0.5 grados de lo establecido en el termostato.

Las características más importantes por mencionar algunas por el cual va creciendo la demanda de esta tecnología en los equipos de aire acondicionado pueden ser por su alta tecnología, mínimo consumo de energía, máxima potencia de operación, alto rendimiento y mayor durabilidad.

Y la ventaja más importante que nos brinda esta tecnología y por qué la buena aceptación en el mercado del aire acondicionado es el “Ahorro Energético” cuando el equipo está en funcionamiento, ya dependiendo de sus características de fabricación de cada equipo Inverter, el ahorro oscila entre el 20-25% e incluso más del 50% en algunos casos, otras ventajas son el ahorro económico, confort térmico, mayor rendimiento, larga vida útil del equipo ya que no arranca y para constantemente en su operación y un nivel de ruido más silencioso.

Pero no todo es ganar, ganar como toda tecnología también tiene sus puntos débiles o desventajas que se tiene que tener en cuenta cuando se adquiere un equipo de este tipo, una de ellas el valor del equipo, su inversión inicial es mucho más costosa que un equipo estándar, también sus costos de reparación o mantenimiento son más altos ya que sus componentes y circuitos electrónicos son más sofisticados y como resultado es más cara una reparación y por último se requiere de técnicos especializados en reparación y mantenimiento de equipos de tecnología Inverter.

Ing. David Correa.