El sistema de aire acondicionado, ya sea de elementos separados (dividido) o auto-contenido (paquete) es hermético, de forma que el gas refrigerante fluye a través de los componentes del sistema en un estado lo mayormente puro, libre de componentes ajenos a la mezcla del gas refrigerante y el aceite del compresor; componentes que puedan afectar sus propiedades de transferencia de calor o bien, el desempeño de los demás elementos electromecánicos que conforman el sistema.

A continuación te mencionamos cuales son los diferentes tipos de contaminantes que puede tener un Sistema de Aire Acondicionado:

Sólidos:

Algunos de los elementos sólidos que pueden encontrarse en el sistema son basuras como partículas de polvo, fragmentos de óxido, fragmentos de cobre (rebabas), etc. 

Esta contaminación es producto de no tener la precaución de efectuar un procedimiento técnico de forma correcta, lo cual, puede generar daños mecánicos como obstrucción de los filtros y del  dispositivo de expansión (tubos capilares o EXV´s), además de que contribuyen estos agentes externos a la descomposición de la mezcla del aceite del compresor con el gas refrigerante, generando una disminución en las propiedades de lubricación del aceite o peor aún, puede ocasionar un daño permanente del compresor.

Una buena práctica para prevenir esos contaminantes sólidos es cubrir los extremos de las tuberías durante el almacenaje, inspeccionar detenidamente los cortes realizados y abocardados en busca de rebabas y durante la instalación, realizar el proceso de soldadura siempre con el paso de nitrógeno a través de las tuberías, para así evitar la formación de residuos (óxidos) de cobre o “escorias" indeseables para el sistema.

Humedad:

Esta es la causa de varios problemas de funcionamiento en los sistemas de compresión y es importante entender en qué se basan.

Básicamente, la humedad puede clasificarse como visible y no visible. La Humedad “visible” consiste en una alta concentración y puede constatarse a simple vista como partículas de agua (gotas).

La humedad “no visible” es una concentración de agua y no se puede constatar a simple vista. La presencia de agua en forma de humedad en un sistema frigorífico puede llevar a otras contaminaciones debido a la formación de oxidación, corrosión, descomposición del refrigerante y aceite, generando un deterioro en general.

Gases No Condensables:

Son gases que, como su nombre lo indica, no son capaces de condensarse dentro de un condensador de refrigeración/aire acondicionado a diferencia del gas refrigerante. Esto puede tener un grave impacto en las condiciones de funcionamiento del sistema, la energía, eficacia y la vida útil de un sistema. 

Estos gases tienen puntos de ebullición más bajos que los comúnmente experimentados en cualquier condición práctica de un sistema.

La razón de hacer un vacío profundo o un buen vacío en los sistemas de refrigeración y aire acondicionado, es para eliminar los gases no deseables, principalmente el aire y el vapor de agua (humedad).

En la industria de la refrigeración y aire acondicionado, la eliminación del aire (más el vapor de agua o humedad) se denomina Evacuación y se realiza mediante un buen procedimiento de vacío al sistema.

Ahora ya lo saben, cuiden que su sistema de refrigeración/Aire acondicionado no sea invadido por cualquiera de estos 3 tipos de contaminantes. El tomar las precauciones mediante las correctas prácticas en campo les ayudará a evitarlos y así lograrán que su equipo tenga una operación óptima, alcanzando su mayor ciclo de vida útil, máxima eficiencia, brindándoles el confort que tanto desean.

En próximos blogs hablaremos más a detalle de los posibles síntomas en nuestro acondicionador de aire ocasionados por estos contaminantes. ¡No se lo pierdan!

Escrito por 

Ing. José Enrique Sanchez Thompson

Ingeniero de Producto

Fuente: ‘Contaminación de sus sistemas de refrigeración’, Publicado en ‘Corpfeser’, Noviembre 2016.